Las discusiones obligadas no son buenas

En mi trabajo hay ocasiones en las que he tenido que discutir con alguien. Si las discusiones importantes - no los debates - me moletan bastante, cuando son en el ámbito laboral y en representación de otros, me molestan aún más. Eso me pasó ayer.


Pasé un mal día. El día anterior, sabiendo que esta discusión surgiría, ya estuve intranquilo, pero ayer fue penoso. No me gustó nada.


La verdad es que este hecho me afectó bastante anímicamente y eso que sé que este tipo de cosas no deberían afectarme. Pero el caso es que me bloqueo y soy incapaz de resolver mis problemas en este estado. En fin, yo creo que últimamente supero estas cosas con mayor facilidad que en el pasado, pero todavía no es suficiente. Me tengo que exigir más en este aspecto.

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