Necesito unas vaciones

No, no os he abandonado, fieles lectores, es que tengo tanto que decir que no sé por dónde empezar y al final termino por no escribir nada.
Esta semana ha sido un poco de bajón. Cuando las cosas no salen como planeas todo parece ir mal, aunque no sea del todo así. Sigo manteniendo mis conflictos internos sobre el significado de las palabras y los gestos, a lo que tengo que añadir un cansancio físico y un cansancio mental, que casi es peor.
Debería poner mi cabeza en huelga, pero creo que es imposible. El mal tiempo, los conflictos personales, el estrés laboral, el estrés lectivo, los problemas familiares, los problemas técnicos, las obras, incapacidad para resolver inconvenientes caseros. Todo eso se va acumulando.
Mi forma de ser, al parecer, lo que hace es mirar un poco para otro lado intentando que no me toque el conflicto. Una forma de escapar de él a base de ignorarlo, pero la verdad es que sigue estando ahí. Dicen algunos que cuando me tope con él de frente, va a ser peor porque se destruirá mi castillo de naipes construido alrededor de esa debilidad estructural. Si la base de mi felicidad la sustento en una mentira, cuando descubra esa mentira todo caerá en picado.
¿Eso sucedió alguna vez? Puede. Lo difícil es encontrar la mentira, porque el autoengaño no siempre es consciente. Simplemente es algo que está ahí y se destapa de vez en cuando.
Bueno, hoy empieza el fin de semana. La semana pasada todo fue bastante mal, perdió el HFC, perdió el Estu, perdió el Atleti, perdió el atleti el martes, me comí un atasco, han tardado mucho en darme el ordenador, no he podido ir dos días a clase y he tenido ciertos agobios. Me han roto la pared de mi habitación y tengo problemas para ducharme. Creo que me ha sentado un día mal la comida, me he quemado la lengua, me estoy constipando y he tenido dos lesiones en la pierna derecha. Además estoy sufriendo un ataque de salpullidos en la cara y soy incapaz de terminarme el último libro que empecé. He tenido internet todos los días menos el día que me hacía falta, he roto la llanta del coche y por eso no he podido llenar el depósito con dinero de la empresa y lo tendré que pagar de mi bolsillo. ¿Puede salir algo más peor?
Pues creo que me estoy constipando.
Algo tiene que cambiar y ya.

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