Acuérdate de dónde aparcaste el coche.
Todo empezó una noche como otra cualquiera. Parece ser que era fin de semana, pues habíamos quedado los colegas para salir por ahí. Era raro, pero había muchos colegas. Nos metimos en un bar y estuvimos toda la noche allí. Allí conocimos a Iva, pero se enganchó mucho a Javier y David. Armando hizo gracias. La noche pasaba y yo no me enteraba. Tres horas desaparecieron de mi vida. entre las 3 y las 6 de la mañana no sé que fue de mi vida, no sé dónde estaba. Fue como si el tiempo hubiese avanzado sin darme cuenta. Lo suficiente como para no enterarme de qué había pasado en la noche, por qué yo estaba sólo y por qué nadie me comprendía. Al terminar la ronda de garitos y tugurios íbamos por la calle, cerca de la calle Alcalá. Iva se había quedado con David y Javier y les había perdido de vista. Gonzalo me dijo que por qué les buscaba, ellos iban a su bola. Yo quería pasar por la tienda de numismática, en el escaparate ponen los precios de monedas antiguas y nos habíamos encontrado una d...