Desapetencia

Hoy no me apetece hacer nada más. Todavía tengo que quedarme aquí 15 minutillos, pero es que no pienso mover un dedo. Lo dejo para mañana. Así, desoyendo refranes.

Y es que hay días en los que "estás perro" y no te apetece hacer nada. O momentos, no tiene por qué ser el día entero. Ahora tengo uno de esos momentos. Ahora me apetece ir a casa, comer y echarme una siesta. Y sí, tengo cosas que hacer, pero no las voy a hacer ahora. Después, por la tarde, cuando haya descansado, pues continuaré si me apetece haciendo cosas.

Sé que estas palabras me llenarán de impopularidad, pero no tenemos la vida que elegimos, sino la que nos ha tocado, y yo tuve suerte. Aún así, también puedes hacer cosas por modificar tu vida para mejor, pero también para peor. Si te empeñas en que todo te vaya mal, te irá mal. Lo malo es que si te empeñas en que vaya mal, tienes posibilidades de que te vaya bien, pero no será tan seguro. Es así, las cosas son difíciles.

Por otra parte, he estado pensando que muchas veces me gustaría abrir un nuevo blog, uno de esos que hago y que después abandono. De hecho este creo que es el más antiguo que sigo manteniendo en pie. Supongo porque no hablo de nada más que de mí, y siempre me ocurren cosas. He pensado en hacer uno editorial, en el que hable de política y sociedad, de Economía e Historia. No sé, uno más conflictivo, de verdad, desde mi ideología y pensamiento. Pero creo que lo abandonaría rápido. y para eso no lo comienzo.

En resumen, que cuando no me apetece hacer nada pienso en cosas que me gustaría hacer cuando tenga ganas, pero al final, si tienes ganas de hacer algo, es mejor hacer las cosas obligatorias que son las que te terminan dando de comer. Eso sí, siempre hay gente muy motivada que supongo que será la que triunfa en la vida y la emprendedora. Yo soy de los que va a remolque, creo. Pero como dije antes, tampoco me va mal, hay que saber buscar algo que te remolque con cierta eficiencia.