Sigo vivo

Creo que es el periodo más largo de inactividad de este blog desde que se creó hace ya casi 11 años. Eran otros tiempos, otras preocupaciones pero una misma persona.

Seguramente si me preguntasen entonces si querría estar como estoy ahora firmaría sin dudar. Aún así sigo teniendo momentos muy malos y angustiosos, porque gran parte de lo que motivó las primeras paranoias personales que alimentaban los artículos de esta bitácora perduran de manera indefinida hasta el fin de mis días (parece), sin embargo hay muchas cosas que han cambiado a mejor.

Y eso es todo, yo creo que ya no tengo seguidores pero por si acaso alguno queda quería confirmar la continuidad de mi existencia física. Realmente tampoco tuve un gran número de seguidores; si sumamos todos los seguidores que he debido tener en el blog no llegaría a diez con casi total seguridad, y de manera simultánea no creo que haya pasado el número de tres. No los voy a mencionar, pero ellos saben quiénes son.

Realmente aquí he desnudado mucho mi mente pero poco mi vida personal, y no lo voy a hacer ahora, así que con esto me despido por hoy.