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Mostrando entradas de 2009

Llegó la hora de la verdad

Esto se publicará en el último momento del año. Aunque realmente todavía queda mucho. Este fin de semana me he decidido a, si tengo posibilidad, comunicarle algo a alguien importante para mí. Si no puedo este fin de semana, porque no tenga opciones o porque no se de la ocasión, espero que no se prolongue mucho. Tengo tres días, espero ver a quien le tengo que dejar las cosas claras. Porque está claro que si no está el interlocutor a quien le tienes que decir las cosas es difícil decirlo, pero espero que nos veamos y que se presente una oportunidad, unos minutos en los que podamos hablar de manera tranquila porque es muy importante para mí. Quizá después de esta conversación no resuelva el asunto que pretendo resolver, pero tengo claro que si no lo intento resolver, por su cuenta no se va a hacer. Llegó la hora de la verdad. Lo que sí que tengo claro es que jamás me arrepentiré de lo que ocurra en este fin de semana (en cuanto a este asunto se refiere claro está, a lo mejor mato a un go

Muros de hormigón

Se confirma. Tengo que volver a acudir a un especialista e iniciar de nuevo el tratamiento. La verdad es que la primera vez lo pasé peor. Ahora estoy en un periodo en el que realmente pienso que tampoco sería tan duro pasar el resto de la vida teniendo que estar medicado para vivir agusto. Si lo pienso bien, la época en la que estuve medicado, sobre todo la última época, antes de dejarlo, estuve bastante bien. Aunque si hago una revisión al blog tuve bastantes malos rollos. Esto enlaza con algo que escribí hace algún tiempo que decía que la memoria es selectiva e intentamos borrar los malos momentos porque no interesa. Hoy he empezado el tratamiento, y espero a que un día de estos me den hora para el especialista. Una semana estaré a medio gas y la semana que viene entraré a saco en el mundo de la psicodelia. Cuando me lo dijeron ayer agarré gran bronca, pero también es inútil luchar con la serotonina a base de dar puñetazos a los muros de hormigón. De hecho podría ser un tema de un gr

Un gesto mío y una palabra tuya me harían conocer la felicidad

El otro día tiré dos meses de desintoxicación a la basura. Supongo que es el otoño, aunque primeramente se lo achaqué a una situación de nerviosismo. Todo empezó el viernes cuando me dieron una mala noticia. Me preocupé, al día siguiente vi las consecuencias de esa noticia y me entristecí un poco, aunque mejoré al ver que no había sido para tanto. Me encolericé un poco al saber ciertas cosas y me puse nervioso al pensar cómo mi vida pudo cambiar. Entonces, cuando mejor estaba, me tuve que ir y me puse más y más nervioso. Decidí quedarme más, porque es lo que quería, pero la reacción nerviosa no tenía vuelta atrás. Al día siguiente estuve fatal, hacía mucho que no lo pasaba tan mal. No levantaba cabeza. Tuve que tomar drogas menores para intentar levantar pero no pude. El lunes tuve que tomar media pirula de las gordas. Había recaído. Por la tarde estuve mejor, claro, efectos de la pastilla. Pero me dio ánimos para interesarme por algo que tenía que hacer y quería hacer y lo hice. Creo

De la libertad de elección

A veces tienes que elegir. Está claro que en la medida en la que tus decisiones afecten a terceras personas, nunca tomarás la elección que beneficie a todos. Esto creo que ocurre en todos los ámbitos. Yo recuerdo que cuando estaba en la Universidad estudiábamos mucho esto. Se podría decir que al final sólo estudiaba esto, la toma de decisiones y sus consecuencias. Esta claro que al final las personas toman las decisiones que más creen que le van a convenir y no lo que va a convenir a otros. Frecuentemente me he encontrado con situaciones en las que tengo que elegir entre dos opciones que dan resultados poco satisfactorio. Ya lo he comentado alguna vez, es difícil decidir cuando tienes dos opciones que te van a repercutir un beneficio que desconoces, pero más cuando sabes que ambas van a tener un coste que desconoces. Tengo un colega que tiene amigos de juerga, es decir, un grupo de personas con las que se lo pasa genial, aunque sabe que no son su gente de verdad, con las que querría

Las anécdotas sobre los hombros

Hacía mucho que no contaba una anécdota y ya va siendo hora. Lo que pasa es que no se me ocurre ninguna buena. Recuerdo un tiempo en el que contar anécdotas sobre los colegas o sobre mi mismo era muy apreciado entre mi público. Nos sentamos en torno a alguna bebida asquerosa en corro y empezábamos a comentar lo acontecido en tiempos pretéritos con gracejo y buen humor. Ahora ya sólo cuanto la anécdota de cuando se me salió el hombro 13 de veces después de una patada jugando al fútbol en la que no me pude apoyar con la mano y estrellé mi cara contra el suelo. O cuando se me salió el hombro estornudando. O cuando se me salió el hombro jugando al baloncesto. O cuando se me salió el hombro estando nadando en la piscina. Y aquella vez que se me salió un hombro desperezándome en la cama y, del gesto de dolor se me salió el otro hombro teniendo los dos hombros fuera de su sitio y casi perdiendo el conocimiento del dolor. Momentos muy divertidos sí. No sé, a lo mejor debería contar más detalla

Malos tiempos para HFC

Últimamente estoy escribiendo aquí lo que no escribo en HFC. La verdad es que lo que escribo aquí no es lo mismo que lo que escribiría allí, pero creo que lo importante es escribir. Lo bueno que tenía aquello es que había una serie de "suscriptores" que leían el cotarro, aunque siempre eran los mismos, y aquí lo leen muchos menos pero de vez en cuando gente anónima te hace un comentario, que eso mola. A ver, si quiero escribir algo que lea mucha gente tengo medios para hacerlo, es una de las pocas cosas que he conseguido en la vida, pero lo que no he conseguido es que la gente lea lo que yo quiero escribir en cada momento. Supongo que para eso tienes que ser Antonio Gala o alguien así. Aunque a veces dudo que los grandes éxitos editoriales sean lo que realmente quiere escribir el autor. No sé, es una pregunta un poco absurda. A veces me gustaría ser como Santiago Carrillo que sale por la tele o la radio diciendo sus cosas sin importarle las consecuencias porque ya está de vue

Ayer me compré la Ilíada

En efecto, fui a la Casa del Libro y de repente me acordé que la tengo en la lista de mi libros para leer y lo busqué. No estaba muy mal de precio, aunque me parece un poco caro que un libro que no tiene derechos de autor cueste tanto, seguro que es por el tema del prólogo. Lo compré porque en su día me leí unos capítulos de la Odisea y me pareció bastante interesante, además la temática siempre es agradable y quiero conocer un poco más de la Edad Heróica y profundizar en la época Micénica. De un tiempo a esta parte estoy más interesado por el mundo clásico en general y griego en partícular. Hay periodos de la historia que me van pareciendo interesantes: Las dos guerras mundiales, los movimientos nacionalistas del siglo XIX en Europa, la formación de los Estados Medievales tras la caída del Imperio Romano de Occidente, El siglo XX, las economías socialistas, Yugoslavia. Y ahora me he interesado por Roma, sobre todo a partir de la Guerra Civil entre Julio y Pompeyo y la caída del Senado

Oficialmente he dejado las drogas

Aunque he tenido que tomar algún suplementillo algún día malo, oficialmente he dejado de consumir sustancias de esas que te comen el coco. Ya llevo un mes y medio desde la última vez que tome y aunque he tenido ganas de recaer he utilizado la sustitución. La doctora me dijo que podría volver a tomarlas si quería pero yo prefiero quitarme de esa mierda que te destruye la cabeza. El otro día lo celebré tomándome un güisqui, in the jar, cosa que hacía años que no hacía. Ahora que he dejado las pastillas no me voy a poner a beber, pero bueno, una vez al año, o cada tres meses no es grave. Es una de las pocas cosas buenas que me han pasado este verano, como conjunto, obviamente ha habido puntos divertidos e interesantes, pero no ha habido nada que pueda calificar como globalmente bueno, salvo esto. A ver si consigo más retos.

Es la incertidumbre

Nuevamente la incertidumbre aparece en mi vida y nuevamente vuelvo a tener la cabeza descentrada. Es increible. Llevo dos semanas con todo prácticamente planificado o dependiendo de mí, ahora esta semana se acabó "lo bueno" y vuelvo a depender en algunas cosas de los demás y vuelvo a darle vueltas a la cabeza. Realmente cuando los planes no salen bien estás fastidiado. Y eso que lo había trabajado y me había ido saliendo todo, poco a poco, con paciencia. Y cuando ya estaba todo encarrilado y sólo quedaba un pequeño matiz, el más importante, sale mal. Ahora no sé que hacer, me he pringado en el asunto bastante y echar para atrás no sé cómo sentaría a la gente. Realmente hago cosas que no haría en condiciones normales y ni siquiera sé si sirve para nada. Y es que hay gente por la que te juegas cosas y no porque no harías cosas por otros, sino porque no lo necesitas. Veré si la semana se va centrando porque esto no me gusta.

De las faltas de ortografía

Haciendo una revisión histórica del "blog", me he dado cuenta de que cometo múltiples faltas de ortografía, puntuación y acentuación. Y no es porque no conozca la norma - vale, en algunos casos tengo dudas y no lo sé - es más bien porque se "me pira la pinza". Aunque la verdad es que viendo lo que se escribe, sobre todo en Internet, tampoco me puedo quejar. Yo procuro que todo lo que escribo sea correcto según la norma establecida, pero no siempre lo logro. Aunque sí que creo que el ejercicio de escribir a menudo ayuda a que cada vez cometa menos errores y que mi forma de expresarme sea más fluida. Así que no sólo escribo por el hecho de ordenar y estructurar mis pensamientos, también lo hago porque fomento el mejorar mi lenguaje escrito. Yo siempre he considerado que es uno de mis fuertes, aunque tampoco debería morir de éxito ni caer en la prepotencia. He visto gente que se creía que escribía mejor de lo que lo hacía y no quiero ser como ellos. Creo que no lo soy,

Trastorno Bipolar II

La verdad es que he visto la necesidad de hacer esta entrada debido a que hice una primera parte. Supongo que cuando empecé a escribirla vi la necesidad de contar algo más y por eso lo pospusé, pero fue hace tanto que ya no me acuerdo bien. El tema iba de la dificultad de tomar decisiones desde un punto de vista de la enfermedad mental. No toda la gente que no consigue sus objetivos lo hace por que no valga, porque no lo trabaje o porque no sepa lo que quiere, también hay gente que tiene un problema psicológico que en ocasiones se podría calificar de enfermedad. El otro día me hablaron de una chica que tiene muchos problemas para hablar con otra gente. Tal y como describían la situación no es un simple asunto de timidez, rayaba la fobia social y quizá se debería hacer un tratamiento. En esa misma conversación se mencionaba a un joven con posibilidades que había caído en un grupo de gente muy echada a perder y que había generado en él una falta de motivaciones en la vida. Este segundo c

Falta de tiempo para ver a la gente

Muchas veces he hablado sobre la gente que pasa por la vida de una persona. Realmente no tienes tiempo para mantener el contacto con todos, así que tienes que seleccionar, y eso es un poco un problema. Si toda la gente que conoces se reuniera a menudo en un mismo lugar sería más fácil, pero el contacto con las personas te lleva a situaciones agradables y desagradables. Hay gente que no quieres volver a ver nunca más, así que procuras no estar cuando está esa persona. Eso te dificulta ver a la gente que comparte espacio con ella. Al final parece que tienes que decidir cuál es tu círculo más próximo, y aún así te cuesta. Y más cuando tú quieres hacer cosas que no quieren hacer otros. Pero últimamente ha surgido un problema adicional. Bueno, supongo que el problema ha estado ahí siempre pero hace poco que he sido consciente. Se trata de que no siempre quieres ver a todo el mundo, hay veces que te apetece ver a tal o cual persona y si los demás andan por ahí, pues bien, y si no no te apet

Viva el doctor. Y nadie más.

Por fin le mande a freir vientos al equipo de baloncesto. Ese equipo que se portó de manera tan injusta conmigo y con otros. No dejo de tener la sensación de que me han robado al estar allí. Pero he aprendido alguna cosa, como el saber que la gente que parece que no merece la pena, suele no merecer la pena. También he aprendido que los favores sólo se los debes hacer a quien no te los vaya a despreciar. Y, por supuesto, que la gente no se la juega por casi nadie y que prefiere mantener lo malo conocido que lo bueno por conocer. En fin, que les den mucho a todos menos al doctor. Sé que este es un artículo impropio, de odio y rencor y demás, pero es que necesito desahogo.

El método científico y pixmania

Este era el título que pensé hace mucho para un "post" de estos, pero con el tiempo he olvidado sobre qué trataría. Supongo que sería una crítica o una refutación del método científico y de las cosas esas de la prueba y el error y la experimentación a la hora de comprar productos electrónicos en una tienda a través de Internet. Es increible la de chorradas que me invento para publicar en el "blog". La verdad es que algo así tiene poco interés, pero menos tiene lo que estoy escribiendo ahora. Mientras tanto pensaré qué puede interesar al gran público. Total, esto lo leen dos o tres personas y con menos asiduidad que en sus inicios. ¿Escribo por ellos o por mí?

Discutir la moral de los demás te puede dar problemas

Ayer estuve con unos cuantos personajes conocidos y me ocurrieron una serie de cosas que quiero pasar a comentar. La verdad es que la charla fue muy amena, últimamente noto que estoy recuperando el carisma que había perdido hace meses y vuelvo a tener sentido del humor, también ayuda que la gente que tienes delante sepa entenderlo. La verdad es que yo intento mostrar seriamente mis reflexiones acerca de las cosas, pero intento explicarlo con cierta gracia. Claro, muchos no me toman en serio, pero es un peaje que creo que debo de pagar por poder decir más o menos lo que quiero. Aún así sigue habiendo cosas que no me atrevo a decir. Por ejemplo, una de las personas que vi ayer hacía mucho tiempo que no la veía, y la vi muy bien, realmente bien, y podría haber hecho un alago, pero no sé por qué no me atreví. A veces lo hago, me gusta decir las cosas bonitas de la gente, no creo que esté de más recordar a la gente sus virtudes. El caso es que la conversación llevó a este blog y a lo que co

Sigue habiendo espacios de mi vida privada que no son para los demás

Un día escribí una entrada en este "blog" hablando sobre mí en tercera persona. No sé, no suelo hacerlo pero ese día lo hice. ¿Por qué? Quizá porque aunque sé que esto es un espacio bastante anónimo y que todo lo que diga aquí lo va a leer o gente que no conozco o gente que no me importa contarles mi vida, sigue habiendo espacios de mi vida privada que no son para los demás. Esa entrada trataba sobre mis sensaciones de un día concreto, un día concreto que podría ser cualquiera, el típico día que quieres hacer cosas pero no sabes cómo hacerlas. Hay cosas que son más fáciles de hacer con ayuda, pero a veces el depender de la ayuda de otros te hace eso, dependiente, y me gustaría ser más autónomo. El caso es que al depender de otros haces planes que nunca sabes si se van a cumplir porque eres dependiente. Quizá si mi vida privada fuera más pública la ayuda dependiente se convertiría en simples consejos y apoyos que me harían volar solo. Pero es que quizá quiero cumplir los pasos

Solo ante el peligro

¿Nunca has tenido esa sensación de que hay algo que si fuese de una manera determinada sería lo mejor para todos pero por no sé que razón no ocurre? Esa es la sensación que tengo. Últimamente estoy obsesionado con un tema que no se me va de la cabeza y es que estoy convencido que, si todo saliese tal y como lo planteo, es que saldríamos ganando todos los implicados. Lo peor de todo es que la mecha y el mechero están en mis manos, lo que pasa es que trato con material inestable y podría explotarme en la cara. O no. La verdad es que no creo que me estayase nada, solamente lo que temo es que después de haber prendido la mecha, resulte que ésta esté mojada y si hubiese esperado unas horas quizá se hubiese secado. A esa situación me estoy enfrentado. Una eterna duda entre prender la mecha, sin saber si está seca o mojada, o esperar a que se seque. La ventaja que creo tener es que creo que la mecha es de buena calidad y no veo factible que se caduque, aunque tampoco es bueno tentar a la suer

Mantener las relaciones sociales mina las personales

Este fin de semana ha sido un poco de diversas sensaciones. Veo como mis principales objetivos conducen a caminos satisfactorios pero no los deseados por mí. Veo como las oportunidades que creía que se podrían presentar quizá no se presenten. Veo cómo sigo haciendo cosas que no me satisfacen del todo simplemente por mantener relaciones sociales. Y veo que algunos excesos, si se pueden llamar así, me pasan factura. Es obvio que nadie puede hacer lo que quiere, pero me gustaría poder despojarme de los complejos y mandarlo todo a freir espárragos. Si volvemos a lo de este fin de semana. Sólo hice una cosa que realmente quería hacer, lo demás, aunque no estuvo mal, no era lo que más me molaba. Pero como ya he dicho es el peaje por tener relaciones sociales. Supongo que no puedo esperar que la gente esté conmigo cuando yo quiero si no lo estoy yo cuando ellos quieren. Al final terminas jorobando un poco a los que menos en cuenta te lo van a tener. Por ejemplo, el otro día descarté un plan c

Comprometer a la gente

En este periodo de tiempo que llevo conviviendo con los humanos me he encontrado con un grupo de ellos un tanto peculiar. Se trata del hipócrita comprometedor. Seguro que todos nos hemos encontrado a varios de estos en la vida porque son bastante numerosos. No son muy peligrosos, es más, se podría decir que son inofensivos, pero son extremadamente pesados y cansinos. Antes de definir el comportamiento del hipócrita comprometedor definamos al comprometedor simple, suponiendo que todo el mundo sabe lo que es un hipócrita. El comprometedor es aquella persona que se acerca a ti a hacerte preguntas retóricas inoportunas con el único fin de que contestes no de manera sincera sino de una manera totalmente como el comprometedor quiere. Principalmente las preguntas suelen basarse en algún aspecto o cualidad del comprometedor que él considera especialmente virtuosa en él pero que no siempre coincide con la percepción del preguntado. Obviamente la pregunta es capciosa. Por ejemplo, si alguien te

La pregunta del millón

¿Qué haces si quieres decirle algo a alguien pero no te atreves?

Descontextualizar las cosas es útil (III)

El otro día hablé con un conocido sobre este blog. Y surgió el tema de descontextualizar las cosas. Y realmente funciona. Me comentó un tema sobre los lugares donde no se encaja y lo asoció con un echo que acontecía a una semana vista cuando el hecho al que me refería ocurrío como dos meses antes. Esto me hace tener dos reflexiones. El primero, como ya he dicho, que el descontextualizar funciona a la hora de no saber ubicar temporalmente lo que cuento aquí. Y el segundo es que las historias se repiten y lo que valía hace dos meses puede valer ahora. A mí estas cosas me gustan, y es que yo soy muy de refranes, alguna vez lo he comentado. Y la sabiduría popular de los refranes se basa en eso, en aprovechar la experiencia pasada para poder afrontar los problemas presentes de una manera más eficaz.

¿Se podría llegar a la conclusión de que soy estúpido?

Tengo la sensación de que no pienso, de que llevo un tiempo en estado de estupidez permanente y no soy capaz de tomar decisiones ni de pensar con claridad. Vivo al momento y de mala manera y soy incapaz de planificar cosas porque no quiero comprometerme con nada porque si te comprometes tienes que cumplir las cosas, y aún así, aún haciendo cosas en el último momento, llega una situación en la que justo dos minutos después te arrepientes de la decisión tomada pero no se puede hacer nada para remediar eso. Hay gente que dirá que eso es la vida. Pero yo creo que eso es la vida de alguien que no tiene lo que quiere y, aún sabiendo lo que se quiere, no sabes como conseguirlo y vas dando palos de ciego para intentar lograrlo y rectifcando y tanteando para intentar llegar de la mejor manera al destino deseado. E l que tiene lo que considera importante, pues puede comprometerse más, porque sabe que tiene cosas cerradas. La vida es un conjunto de cosas y hay aspectos que puedes tener cerra

Comentario de texto, bueno, de frase

"Hoy me apetece estar con alguien, con alguien en concreto. Pero no depende sólo de mí. No es que no quiera estar con nadie más, es más bien que prefiero estar con esa persona antes que con otras." Seguro que alguna vez os han dicho algo parecido. ¿Cómo os sentiríais si os dijeran eso? Supongo que una persona que se siente así puede defraudar a otra gente que quiera estar con ella. Pero quizá no se pueda tener todo en esta vida. Además, el hecho de que no dependa de esa persona puede deberse a muchas causas. No sé, este es un blog personal pero me gustaría que la gente interpretara esa frase. No creo que conteste mucha gente, quizá los clásicos, quizá con eso es suficiente.

Revisión histórica del blog

En una entrada del 12 de abril de 2007, lo podéis ver en histórico, ponía los sitios a visitar, sitios donde viajar. Pues me parece que a día de hoy, he ido a todos esos sitios ya. Cuando publique esto, lo reeleré, lo confirmaré y, de ser así, haré un artículo sobre qué me parecieron esos sitios, que han tenido suerte dispar. ¿Será que al final siempre hago lo que quiero? Esto daría un vuelco a lo que es mi vida. Además, cuando esto se publique es posible que mi vida haya volcado realmente en muchos aspectos. Hablaré sobre el tema también.

Descontextualizar las cosas es útil (II)

Hace un tiempo que escribí el primer artículo sobre este tema. Me di cuenta que empecé un párrafo diciendo algo sobre la inestabilidad emocional. Es curioso, porque meses después, me di cuenta que la situación era la misma, es decir, no sé si el origen era el mismo, pero sí que había una desestabilización emocional. Debe ser que la desestabilización de este tipo es frecuente en mí. Y eso no es bueno. Creo.

Makinavaja

No sé por qué, bueno sí lo sé pero no viene a cuento, me he acordado ahora del Maki. Quicir, el Maki no era un buen hombre, se dedicaba al arte del ladronicio de manera semiviolenta y causando el terror, y esos son valores que no se deben fomentar. Pero tenía su cierto gracejo el tío. Yo no sé si preferir la versión televisiva, la cinematográfica o la de tebeo de El Jueves, la verdad es que todas tienen su punto. El Jueves es la original, es el Maki en estado puro. La tele tenía un ritmo mucho mejor que las películas, pero la actuación del abuelo y de Pajares en la versión cinematográfica es buenísima. Momentos gloriosos como la tortuguita, la tristeza de la muerte de un anarquista, el moro robándole la cartera para dársela al pira, la farmacéutica preguntando si la van a violar, el robo en el museo. Son pequeños detalles que hacen que la vida sea más entretenida. Pues eso, que me he acordado del Maki y quería compartirlo.

De por qué los romanos ponían de (II)

Bueno, hace un tiempo escribí sobre este tema. Tenía la duda de por qué muchas obras clásicas empezaban con la preposición "de". Pues un seguidor me mandó una explicación que le había contado un seguidor suyo. Y esto es lo que expuso: Aunque normalmente se traducen sin preposición ("La Guerra de las Galias". "La ciudad de Dios") sería más literal traducirlo como "sobre la Guerra..." o "en torno a la Guerra...". Aquí pasa como muchas veces en Latín: que más sintéticos no pueden ser. Y entonces, como más sintéticos no pueden ser, van y quitan alguna palabra extra y no la escriben porque la dan por sobreentendida. Por ejemplo, si no me equivoco, el título completo de la (así llamada) "Guerra de las Galias" no es "De Bello Gallico" a secas sino "Commentarii de Bello Gallico". Ahora se entiende mucho mejor, ¿verdad? "Comentarios sobre la Guerra Gálica". Lo que pasa es que como buena parte de lo que esc

La gente con la que no estás

Hay gente a la que hechas de menos. Siempre hay alguien ahí con quien te gustaría estar y no estás. Yo por eso aprecio tanto los fines de semana y odio los días de diario. Seguramente sea uno de los motivos por los que no estoy a gusto con mi vida y con mi trabajo. Necesitas estar con la gente que necesitas estar, y si no están, estás a disgusto. Esto es primordial para entenderme a mí. Yo creo que esa es la razón de que sea tan apático y tan malhumorado. Me gustaría ser alguien extrovertido y gracioso o algo así, pero no lo soy, y es que siempre tengo en mente la gente que me falta. Bueno, esto no es del todo así, la vida es más compleja y te da respiros. Pero la verdad es que cuando no tienes esos respiros es cuando más te das cuenta la gente que te falta. Pero ¿por que te falta la gente? Lo peor es que hay mucha gente que te falta no porque no esté ahí, sino porque no le pides que esté. Esto me lleva a una profunda reflexión ¿Por qué no le decimos a la gente que queremos que la qu

La gente de tu rollo

Cuál es el rollo de la gente, esa debería ser la cuestión. Yo muchas veces digo que alguien que me cae bien no va conmigo porque no es de mi rollo. Y es que hay gente que no es de tu rollo, gente que tiene otras aspiraciones en la vida. Podría poner ejemplos de gente así, pero no sería educado, así que seguro que todos tenéis en mente a alguien que va a los cumpleaños de vuestros colegas, un primo, algún vecino que os cae bien, que os reís cuando está y os lo pasáis genial ese día, pero sabes que no podrías seguirle el ritmo más días porque no son vuestro rollo. Seguro que sabéis a qué me refiero. Por ejemplo, a mi no me molan ciertos rollos juveniles de hoy en día, y la gente que es de ese rollo no es de mi rollo, pero esa gente me puede caer bien. Lo chungo es que hay gente que crees que es de tu rollo y después no lo es. O sí, nunca se sabe. Yo procuro juntarme con gente de mi rollo, y eso a veces me ha causado problemas. Con lo que a veces creo que es que mi rollo cambia a menud

Siempre están los mismos

A lo largo de mi vida he tenido la suerte o la desgracia de conocer a muchísima gente. Centenares de personas, no exagero. Mi casa, mi edificio, mi barrio, mi colegio, la academia de inglés, las clases de natación, la escuela de verano, las vacaciones estivales, el pueblo, la familia, el instituto, la universidad, los curros, los amigos de amigos... A lo largo de una mediana vida has hablado con miles de personas y te acuerdas del nombre de gran parte de ellos. Está claro que de la mayoría guardas un buen recuerdo, no de todos. Pero al final siempre hablas con los mismos. Es la famosa frase de Toshack. El lunes pienso que voy a cambiar a todo el equipo, después piensas en dejar al portero, el miércoles piensas que hay otros dos o tres que valen. Y el domingo vuelves a salir con los mismos "once cabrones" que te hicieron perder la semana anterior. Pues supongo que con las relaciones personales es igual. Te enfrentas a tus colegas, discutes, incorporas a gente nueva en tus ento

Sitios donde no pegas

De vez en cuando, debido a las famosas relaciones sociales que tanta gente glorifica, me meto en sitios en los que creo que no pego nada. En esos sitios hay gente que me cae bien y tal, pero también hay gente que me cae fatal, principalmente agentes patógenos. En correos pasados hablé de estos personajes exóticos. Pues bien, al final simpre hay alguien por el que merece la pena acudir a esos sitios, pero realmente es duro. Yo creo que seguiré yendo a esos sitios donde no pegas. Pero ¿por qué no pego? Supongo que es gente que no es de tu rollo. Haré un artículo sobre qué es el rollo. En fin, es gente que tiene otros intereses, otras inquietudes y otra manera de ver la vida y que coincide contigo en el espacio y en el tiempo por casualidades diversas. Hoy he recibido un hilo de correos electrónicos sobre un evento de este tipo. Ya digo que iré, creo, por lo menos a día de hoy tengo intención, pero realmente sé que no voy a hacer lo que más me molaría hacer ese día. Pero ya he dicho muc

Malos rollos con la gente

Alguna vez he comentado el tema de ir defraudando a la gente. Pero a veces es al revés, es la gente la que te defrauda a ti. Hoy me he topado con esa situación. La verdad es que esta persona me defrauda a menudo, y aún así sigo esperando cosas. No sé, la verdad es que ya hace mucho que dejé de considerar a esta persona como alguien decente. No sé, no es que no se le aprecie y tal, al fin y al cabo es alguien que conozco y que pulula por ahí de vez en cuando. Pero ya no me mola su rollo. No sé supongo que cambian los intereses de las personas. Algún mal rollo del pasado, desinterés demostrado entre ambas personas y demás hacen que la gente se deje de hablar. No es la primera vez que me pasa. Ya he comentado aquí gente que de la noche a la mañana desaparece de nuestras vidas de una manera tan repentina como entraron, al final siempre estamos los mismos. Bueno, yo voy a mi objetivo.

¿Qué hacer si tienes un proyecto en marcha?

Hace poco que empecé con un nuevo proyecto en mi vida. Un proyecto ambicioso. De hecho lo empecé en Mayo, el día del Barça-Madrid famoso del 6-1. Ahora creo que estoy dando demasiados datos, pero en fin, creo que es irrelevante. El proyecto me vino encima. Es cierto que es un proyecto que durante mucho tiempo he tenido en mente pero nunca he visto una oportunidad de llevarlo a cabo, pero ahora creo que debería empezar ese proyecto. Como tantos otros proyectos, no sólo dependes de ti, y ahí radica el problema, en convencer a los demás en que se embarquen en mi ambicioso proyecto. Cuando intentas embarcar a otra gente en un proyecto tuyo tienes que tener una cosa clara, que tienes que convencer a los demás de que ese proyecto no solo es útil para ti, sino para ellos. Supongo que si para ellos el proyecto no es interesante te quedarás solo en él, y claro, este proyecto solo no vale para nada. Así que me estoy marcando una serie de objetivos a cumplir como requisito para empezar el proy

Siempre negativo, nunca positivo

Se supone que hoy estoy rumbo a Escocia. A estas horas todavía no habré llegado, creo, aunque estaré a punto de estar a punto. A ver como se da la semana. Hace no mucho me hice un viaje, pero es la primera vez que me adentro en un sitio poco civilizado desde que soy enfermo crónico dependiente. Si todo sale bien, me alegraré. Si no, pues reflexionaré sobre el hecho. Tengo muchas ilusiones puestas en pasar un buen verano. Cuando pones muchas ilusiones en algo corres el riesgo de que te decepcione fácilmente. Siempre negativo, nunca positivo.

Por qué no se puede conciliar el sueño

El otro día oí un programa en la radio en el que invitaron a una psicóloga especialista en trastornos del sueño. La señora había escrito un libro para enseñar ciertas técnicas para aquellos que tengan algún problema de sueño. Se supone, o eso entendí, que no era para casos graves, que esos deben ser tratados de manera especial, sino de pequeños trastornos que ocurren de vez en cuando en periodos más o menos prolongados. La profesional venía a decir que la dificultad para entrar en un sueño profundo por las noches suele deberse a que eres incapaz de relajarte y la actividad cerebral es tan intensa que no logras dormir. Técnicas de relajación como escuchar la radio, leer un libro o escuchar música clásica podrían ser beneficiosas para que el cerebro se calme. Obviamente yo no entiendo nada de esto, y no sé cómo se puede "parar" la actividad cerebral. Vamos, seguro que eran términos coloquiales para que se entienda y que en realidad es que habrá funciones cerebrales que requie

Descontextualizar las cosas es útil

Cuando escribí esto estaba en una situación bastante complicada emocionalmente. Eso suena muy mal, pero es así. Hace tiempo que escribo de manera atemporal, es decir publico lo que escribo días, semanas, incluso meses después de que redacte esto. Esto me permite que cuando lo publique lo relea y vea como a evolucionado lo que comento en ese periodo de tiempo y, además, si alguien que conozco lee esto no sepa muy bien a qué hechos me refiero porque no sabe contextualizarlo. El descontextualizar las cosas es útil para ganar objetividad. O al menos eso creo yo.

Teoría de la bola de nieve

Creo haber aprendido algo nuevo. Aunque no estoy seguro. Se trata del tema de los coflictos entre personas, tema recurrente. Muchas veces he visto que los enfrentamientos entre personas se producen por no hablar. Es decir, si yo hago algo que te disgusta y tú no me lo dices, me vas a albergar un "odio y rencor" que va a estar ahí por mucho tiempo esperando a que en la situación más favorable salga a relucir, provocando que un hecho aislado y, podría ser, sin importancia, se magnifique con consecuencias catastróficas. Supongo que el problema reside en que es difícil decirle a alguien que te está molestando, es más, es difícil también que si le dices eso a alguien no se sienta molesto por ello. Hace poco viví una situación similar, en la que te vas enfadando con alguien en un proceso que se hace grande como una pelota. No sé cómo resolverlo, poque la situación ahora es tan insostenible que ya ha dejado hasta de interesarme, pero me sigue afectando.

De por qué los romanos ponían de

Yo no sé Latín, un fallo sin duda. Me llama la atención que muchas obras clásicas latinas llevan la preposición "de" delante del título de la obra. Creo que la más famosa, por lo menos para mí, es De Bello Gallico . Está traducida como "La Guerra de las Galias". Pero claro, qué pinta el "de" ese ahí. Nunca nadie nos lo explicó y a mí me gustaría saber qué objetivo tiene. Algún día lo sabré y haré un artículo.

El sábado metí tres goles - Y a mí que más me da

Hubo una vez un hombre que tenía un dolor de hígado que no le quitaba. Este hombre que pudo existir contaba sus peripecias así: No duermo por las noches, no me centro por las mañanas, estoy dubitativo por las tardes. Es difícil expresar sentimientos con palabras, pero tengo un estado de alteración permanente que sólo se me pasará con el tiempo. Es irremediable. Me imagino mi vida de otra manera, cómo sería. Pero no es, no sé, pero no es. A mi me gustaría, mucho, pero es complicado lanzarse porque no soy capaz de ver la ocasión, si es que ha hubo, la hay o la habrá. Me dirás que qué pierdo, en principio nada, pero valoro más esperar a una posición óptima, que tampoco sé si llegará. ¿Por qué me duele el hígado? Por la incertidumbre; la primera ¿cuándo volveré a tener ocasión? Sé que algún día llegará, pero no sé cuando. El próximo fin de semana, dentro de un mes, después del verano… entonces ¿será tarde? ¿Habré perdido mi oportunidad si es que alguna vez la tuve? Seguro que Sabina compon

Me duele el hígado

¿Qué es el dolor de hígado? Preguntad a Javi, él es experto en hígados, ingratitudes y Joey Tempest. Y lo curioso que es cuando todo ocurre el mismo día. A medida que va pasando la semana el hígado me duele menos, pero madre mía que dolor tuve el sábado. Esto es algo así como el cagómetro pero en chungo.

¿Iré al Valhalla?

Después de ver a los Manowar puedo decir que está bien. Fue un espectáculo, de luz, fuegos artificiales, sonido, greñas y metal. Hubo alcohol, heavy metal, fantochadas, bajos, guitarras, dobles bombos y todo eso que se le puede pedir. Además me entere que los "fans" de Manowar son machos puta madre . En fin, que merece la pena ir. En cuanto al fin de semana fue desigual, sobre todo porque la noche viernes-sábado no dormí y al día siguiente llegué a la cama a las siete. Eso, no se lo recomiendo a nadie. Todo sea nuevamente por el metal.

Al Valhalla hemos de ir

Me voy a ver Manowar. Ya contaré cómo fue de igual manera que he contado otros conciertos a los que he ido. Yo creo que Manowar es lo mejor en Heavy Metal, y los que opinan lo contrario son unos moñas. Hay cosas en sus letras que no me cierran, como sus cánticos a Loki, al que bautizan como Dios del Fuego, y cuando se refieren a Sleipnir como portador de héroes camino de Asgard, que yo recuerde eran las Valquirias las que recogían a los muertos con honor, pero bueno, todo sea por el metal. Pero sin duda, los himnos de batalla y temazos que tienen los Manowar no los tiene nadie más. Y por eso me gusta. A ver cómo termina el día.

No hay respuestas para todo

Me he dado cuenta de que hacía algún tiempo que no escribía. Y quizá hoy no sea un buen día para escribir o quizá sea el mejor, nunca se sabe. Realmente esta semana ha sido un poco nefasta, y no tengo previsto de que vaya a mejorar. Esto lo digo continuamente, y siempre se me acusa de no hacer nada. Me da igual, no hago nada, quizá, porque no sé qué hacer. No hay respuestas para todo. Digo yo. Si hubiera respuestas para todo no viviríamos en la incertidumbre y el mundo sería diferente. No sé si mejor o peor, pero tengo claro que diferente.

Último tren a Londres

Hace casi tres años que empecé a escribir en este sitio. Sin ninguna pretensión, sólo yo sé por qué empecé a escribir y nunca he querido contarlo. Ahora tampoco lo voy a hacer pero sí que tengo unas motivaciones secundarias que se pueden contar. Básicamente empecé a escribir por un motivo concreto, por un hecho que me ocurrió unos días antes de empezar con el "blog" y por el interés en expresar lo que me pasaba por la cabeza ante ese hecho. En el fondo subyace mi interés por ordenar las ideas que pasan por mi cabeza. Y el mejor método que he encontrado para hacerlo es escribir. ¿Por qué en un sitio público? Supongo que por un cierto afán exhibicionista que tengo y porque aquí tengo facilidad para recuperar lo que dije y ver cómo ha evolucionado mi pensamiento a lo largo del tiempo. Pues bien, ahora mismo estoy viviendo una sensación similar a la de hace tres años, sólo que tiene ciertos matices diferenciadores importantes. Recuerdo que en aquel momento la sensación que me c

Sabiduría popular frente a iluminación individual

Yo soy muy de refranes. No en emplearlos para aconsejar a la gente, sino para aconsejarme a mí mismo. Una forma de saber el porqué de las cosas es acudir a la sabiduría popular. Leí por ahí en un libro o algo similar (Internet) que la capacidad de adquirir conocimientos por un solo indivíduo estaba muy limitada. Sin embargo podemos tener claro que los conocimientos que abarca un individuo en la actualidad es superior que el que alcanzaba hace un par de siglos, por no hablar de gente del medievo. Esto es así porque las generaciones presentes se aprovechan de los conocimientos de las pasadas, es decir, que todo el tiempo que un pensador del pasado empleo en sacar una conclusión, hoy en día no tenemos que gastarlo y sólo aprovechamos su conclusión. Incluso si queremos profundizar en el método de obtención de la conclusión podremos saltarnos muchos errores y centrarnos sólo en el pensamiento. Es por ello que cuesta ver gente que opina que ellos por sí sólos consiguen obtener conocimiento

El hartazgo no es intolerancia

Hay gente que dice que con la edad te vuelves más intolerante. A mí creo que eso no me pasa, la indiferencia que me provoca lo que se mueve a mi alrededor es creciente y, por lo tanto, la tolerancia. Lo que sí que se agota es la paciencia así como aumenta la debilidad. Hace unos años podía aguantar impropieros durante más tiempo que ahora. Hoy en día no soporto que se me esté mangoneando de una manera descarada. Pero como he dicho, esto no es una muestra de mayor intolerancia, sino de menor paciencia. Además, estas cosas que se aguantaban antes de manera estoica, hoy me duelen, y eso es algo duro. Lo peor es que el juntar ambas cosas te hace más vulnerable y propenso a caer en bajadas de estado de ánimo, con las consecuencias que eso tiene. No es agradable el que la gente te esté basureando todo el día, aunque sea en plan coña. ¿ o sí? Dice el refrán que lo importante es que hablen de ti, aunque sea mal. No sé si termino de estar de acuerdo.

No hay dos situaciones iguales

El otro día descubrí con tristeza y perplejidad la hipocresía en mi interior. Un momento de hartazgo y pesadumbre. Siempre he defendido las palabras claras y la verdad en las relaciones sociales. El ir por detrás no es mi estilo ni me gusta que otros lo practiquen. Esto lleva a que a veces digas algo que mucha gente pueda considerar políticamente incorrecto y ganarte malos encuentros con la gente de tu alrededor. El insulto y la demagogia también son prácticas habituales en mi discurso, el doble juego de las palabras y la tergiversación y manipulación. Supongo que eso puede llegar a molestar. Lo que no sé es hasta que punto yo permito eso hacia a mí. Es decir, si alguien utilizase la demagogia, el insulto y el mensaje fácil y dañino para desprestigiar de manera ridiculizante mi discurso, no sé como me lo tomaría. Supongo que mal. Ahí es donde descubrí la hipocresía. Siempre hay alguien en tu mundo cercano que se comporta de dicha manera, yo lo descubrí hace unas semanas, una persona

Adiós al HFC Tím

Sí. Yo me piro de allí porque es una casa de meretricio. Me voy porque creo que se me ha tratado de manera injusta, me voy porque me he sentido solo defendiendo causas razonables, me voy porque creo que a otra gente no se le hubiese hecho lo mismo y, sobre todo, porque los que peor se han portado son los que menos hubiesen tolerado que se les hubiese hecho a ellos lo que se me hizo a mi. Me da pena porque la inmensa mayoría del equipo son gente agradable, pero que haya dos o tres indeseables deportivos hace que esto no merezca la pena.

Ya es primavera en el corte inglés

Pues sí, y según el refrán la sangre altera. Y me parece que es cierto. Yo no entiendo ni sé nada de cómo funcionan los cuerpos por dentro, pero lo que sí que tengo claro es que los cambios de estación afectan. A mí por lo menos, no puedo hablar del resto de la gente. Y no sólo me refiero al cambio que supone el tener alergia y que todas las plantas estén esparciendo algo que te provoque picores y malestar general, me refiero a cambios en la cabeza, cambios en el estado de ánimo. Yo ya empiezo a cansarme de esto pero me parece que no se puede luchar contra ello. En fin, qué se le va a hacer.

Por qué se rompen las relaciones

Las relaciones personales son difíciles. Por mucho que queramos ser sinceros con los demás siempre estamos tentados a decir lo que los otros quieren oír. No sé si eso es bueno o malo pero lo que tengo claro es que todo el mundo lo hace en alguna medida. Hay veces que las relaciones con las personas te provocan malestar. En ese caso puedes afrontarlo o borrarte. Conozco ejemplos de ambas situaciones y, la verdad, no sabría decir cuál sería la mejor opción. Yo mismo he practicado ambas y he visto a gente hacerlo de igual modo. Desde fuera nunca se sabe bien cómo se puede llegar a esa situación de preferir no ver a alguien que el enfrentarlo. Pero cuando te sucede parece que lo entiendes mejor. Hablando una vez con un colega del asunto, llegamos a la conclusión de que hay momentos en los que alguien te hace tanto daño que llegas a no querer verle y que esa situación se produce cuando esperas algo de alguien que no ha cumplido. El problema es ver si esa persona te había dado alguna vez a

No puedo decir la verdad

Hay gente que le da mucha importancia a la verdad, o eso dice. Yo creo que a la gente le gusta mentir, pero no como una enfermedad patológica, sino porque creen que mintiendo se protegen ellos mismos o a otras personas. En cierto modo creo que yo también estoy en ese grupo. Es difícil decirle a alguien que está tirando su vida a la basura, o que está cometiendo un error o que sus decisiones le van a ocasionar un gran disgusto. Incluso yo mismo seguro que de vez en cuando me invento patrañas para ser más feliz. Esto nos lleva a pensar que hay ideas imaginarias que sirven para llevar la vida de mejor manera. Supongo que hay dos tipos: las que cuentas de manera inconsciente y las que cuentas a sabiendas de que es mentira. Supongo que hay más tipos de clasificaciones, como puede ser las que hablan de mentiras explícitas y las que se utilizan como omisión de la verdad. A mi me gustaría centrarme más en la primera clasificación. Yo conozco gente a la que me gustaría decirle lo que pienso de

La Diabetes y yo

Hace menos de un mes que sé que soy diabético. Es un incordio, pero por lo demás procuro hacer vida normal. Ni siquiera sé si todo lo que hago está bien, pero yo lo hago. La verdad es que no me ha afectado demasiado, parece incluso como si fuese más feliz. Supongo que será uno de esos rollos psicológicos en los que una causa de estas le da sentido a tu vida, puedes culpar a algo a alguien de las cosas que no te van bien. El que no se consuela es porque no quiere. O eso es lo que he sacado en claro de esta corta experiencia. La gente habla de que ellos no podrían: miedo a las agujas, necesidad de tomar dulces y/o alcohol. No sé, supongo que el organismo es inteligente y si estás predispuesto a sufrir estas enfermedades aquello que te hace daño te resulta desagradable. Pero la verdad es que no me privo de casi nada. Tampoco es como dicen algunos de que haces de todo. A mi me gustaba tomarme mi Coca-Cola por las tardes y de vez en cuando tomarme un buen bocata. Pero ahora lo tengo que hac